La Fiscalía General de la República (FGR) obtuvo la vinculación a proceso en contra de Mario Alberto “N”, mejor conocido como “El Betito” o “El Betillo”, quien es identificado como sobrino de Osiel Cárdenas Guillén, exlíder y fundador del Cártel del Golfo. Junto a él, las autoridades procesaron a otros dos individuos, identificados como Raúl “N” y Kevin “N”, por su presunta responsabilidad en delitos federales.
Ayer, el Ministerio Público Federal aportó las pruebas necesarias para que un juez dictara el auto de vinculación por los delitos de posesión de armas de fuego, cartuchos y cargadores de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas, así como delitos contra la salud relacionados con el comercio de clorhidrato de metanfetamina.
Como medida cautelar, se les impuso prisión preventiva oficiosa, la cual deberán cumplir en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Apodaca 1 Norte, en Nuevo León. Asimismo, la autoridad judicial otorgó un periodo de tres meses para que se lleven a cabo las investigaciones complementarias del caso.
DETALLES DEL ARRESTO
La captura de los tres sujetos se efectuó el pasado 21 de diciembre en la avenida Lázaro Cárdenas, en el municipio de Monterrey. Al momento de su detención, los individuos se encontraban a bordo de una camioneta tipo pick up en el estacionamiento de un establecimiento comercial, donde se les aseguraron las armas y las sustancias ilícitas mencionadas.
En el operativo participaron diversas agencias del Gabinete de Seguridad del Gobierno de México, incluyendo la Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Marina, la Guardia Nacional y autoridades estatales.
PERFIL DEL IMPUTADO
Mario Alberto “N” es hijo de Mario Cárdenas Guillén, alias “El M1”, y cuenta con un historial delictivo que incluye detenciones previas en 2009 y 2019. Aunque fue absuelto en 2022 por un juez del Estado de México.
Agencias de seguridad tanto nacionales como estadounidenses lo señalan por presuntas actividades de tráfico de armas, secuestro y trasiego de drogas.
Dentro de la estructura delictiva que integraba, se presume que “El Betito” desempeñaba funciones de administración, supervisión y dirección. Respecto a sus acompañantes, se identificó a Raúl “N” como su compadre, mientras que Kevin “N” es señalado como parte de la misma organización criminal.