• Más del 45% del agua disponible en México se pierde por fugas, tanto en calles como en hogares; detectarlas genera ahorros a la economía del hogar.
  • Realizar revisión anual a las tuberías de casa favorecerá el cuidado del vital líquido.

Las fugas de agua ponen en riesgo la sustentabilidad en muchas zonas del país, limitan el acceso de las personas a este recurso natural y pueden convertirse en un verdadero dolor de cabeza, si no se detectan y atienden a tiempo. De acuerdo con diversos organismos, más del 45% del agua potable disponible en México se desperdicia debido a fugas, tanto en calles como en hogares, lo cual agudiza un problema generalizado en todo el país.

Por lo anterior, Aguakan, empresa especializada en infraestructura hidráulica, comparte algunos consejos para detectar fugas en casa ante cualquier sospecha y/o previo a realizar algún trabajo de plomería extrema. “Lo primero es investigar una posible causa de la fuga; luego, llamar a un especialista y con base en el diagnóstico conocer los pasos a seguir como: romper paredes o tuberías, reponer equipos o incluso llamar a las autoridades pertinentes”, señala Alejandra Mayorga, encargada de relaciones con la comunidad de Aguakan.

Ante la menor sospecha de una posible fuga en las tuberías, baño o llaves de paso en casa, se recomienda lo siguiente:

Tubería

  • Llena el tinaco y dibuja una marca al nivel que llega el agua.
  • Deja abierta la llave de paso del tinaco a la casa. Evita usar agua por unos 20 minutos. Si al revisar el nivel de agua bajó, es muestra de que hay una falla.
  • Verifica si la tubería expuesta u la oculta presentan alguna fuga.

Sanitario

  • Fuga por alto nivel: Abre el depósito de agua y comprueba que el nivel no esté sobre el rebosadero. Si esto pasa, el agua se escapa por el tubo, ¡cuidado!
  • Fuga en la ranita: Sostener el flotador de depósito de agua. Si el nivel baja y la ranita no sella, es señal de un problema ¡atiéndelo!

Llaves

  • Verifique que el empaque de las llaves selle adecuadamente.
  • Gira la llave y, si al hacerlo no cierra el paso de agua, se presenta fuga en la válvula.

Una recomendación adicional aplica en zonas de climas extremos, donde el frío o el calor pueden generar afectaciones en la infraestructura de nuestro hogar y/o sistema hidraúlico. En estos casos es muy recomendable hacer revisiones constantes, al menos una o dos veces por año.

El cuidado del agua es responsabilidad de todos. ¡Vamos a cuidarla!