El Arzobispo Rogelio Cabrera López, presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) aseguró que México está llegando a un “punto insostenible” de violencia, por lo que pidió a los ciudadanos realizar acciones para que las cosas cambien.

Durante la misa de este domingo 10 de julio, el presidente de la CEM pidió también “con respeto” a las fuerzas de seguridad de las tres órdenes de gobierno que sepan contener la violencia y “contener a aquellos que abusan del poder fáctico que tienen“.

“Cuánto sufrimiento tienen muchas familias de nuestro país a causa de la violencia, tienen que escapar, tienen que huir. Muchos otros han perdido y no saben dónde está su familia y también muchos otros han perdido la vida”, expresó.

Ayer la Iglesia Católica y la comunidad de jesuitas dieron inició a la Jornada de oración por la paz, ante el aumento de violencia y desapariciones en el país y luego del asesinato de dos sacerdotes jesuitas y un hombre que se dedicaba al turismo en Cerocahui, en la sierra de Chihuahua.

Es de destacar que la Compañía de Jesús había anunciado que la Jornada de oración por la paz contempla cuatro diferentes puntos:

  • El primer domingo, 10 de julio, en todas las misas se hará memoria de todos los sacerdotes, religiosos y religiosas asesinadas en el país. En los templos se pueden colocar fotografías de las víctimas.
  • Durante el mes de julio se celebrarán misas y oraciones comunitarias en lugares significativos que representan a todas las personas que han desaparecido o sufrido una muerte violenta.
  • En las eucaristías del día 31 de julio se pedirá por los victimarios y las instituciones gubernamentales, se orará por sus vidas y la conversión de sus corazones.
  • Cada Diócesis, Congregación Religiosa o Parroquia definirán acciones a emprender como son horas santas, procesiones por la paz y mensajes al pueblo de Dios.