Por Teófilo Benítez Granados, Rector del Centro de Estudios Superiores en Ciencias Jurídicas y Criminológicas (CESCIJUC).

Existen cinco grandes concepciones de la Universidad, que procede del sustantivo latino universitas que significa universalidad, total o el entero de las cosas. El vocablo universidad, en este sentido, está emparentado con universo, referido al todo, el conjunto del mundo.

La palabras universidad y universo están compuestas por el adjetivo numeral unus (uno, aquello que no tiene división) y versus, del participio pasado del verbo verto, que significa girar o hacer girar.

Universidad, por tanto, según el análisis de su etimología, significa aquella institución o espacio que, siendo uno, está vuelto hacia todos los conocimientos, de los que ella misma es generadora, atesoradora y transmisora.

Existen cinco grandes concepciones de Universidad:

La primera concibe a la Universidad como un centro de educación. Su principal función es la de cubrir las aspiraciones del saber de todo individuo. Parte de una educación general y desinteresada. También destaca el valor de la reflexión y da prioridad a la formación moral e intelectual por encima de las competencias profesionales.

Es una universidad elitista donde cobra importancia la figura del tutor y el régimen de internamiento académico. De este tipo de universidad son las inglesas Oxford y Cambridge.

Otra variante es la universidad considerada científica. Está basada en el modelo de la Universidad de Berlín. En este modelo se asume que la humanidad aspira a la verdad y para ello requiere crear una comunidad de investigadores formada por profesores y estudiantes. La actividad privilegiada aquí es la investigación dirigida al desarrollo científico.

En este modelo el principio idealista es la unidad del saber humano, está organizada por facultades y la libertad académica se considera un valor fundamental. Este modelo tiene gran influencia en universidades de Estados Unidos, Europa, Japón y América Latina.

La tercera concepción es la universidad como factor de progreso. Busca enseñanza y capacitación, pero también imaginación, entusiasmo creativo y útil al servicio del progreso social. Tiene un carácter altamente pragmático.

La cuarta concepción de universidad es la profesionista. Es una institución al servicio de las necesidades del Estado, basada en la formación profesional de fuerza de trabajo para garantizar el desarrollo y estabilidad del Estado nacional. La investigación aquí queda en segundo plano.

En este modelo la universidad constituye una especie de ejército y los profesores funcionan como servidores públicos a sueldo del Estado.

El quinto modelo de universidad es el que considera a la institución como un factor de producción. Se trata de un instrumento útil que sigue las orientaciones del gobierno central. Su misión es contribuir a la construcción de la sociedad comunista al educar desde los parámetros del marxismo-leninismo. Este tipo de universidad se ocupó de la formación científica, profesional y política de los estudiantes e investigadores. A la caída del comunismo se disolvió este modelo.